Es normal que los niños se sientan atraídos hacia los animales y adoren mirarlos usando todos sus sentidos. También les encanta trabajar con materiales tridimensionales como Play-doh™ y arcilla.
Conecta estos intereses invitando a tu niño a hacer animales moldeados. Empieza por involucrarlo en conversaciones sobre los animales que ven cuando están fuera.
¿En qué se parecen y en qué son diferentes los animales que ves? ¿Qué características tienen todos? ¿Qué tiene cada uno que no tiene ningún otro?
Luego, dale arcilla o Play-dohTM (puede comprarse o hacerse en casa) e invita a tu niño a esculpir su animal favorito. Mientras trabaja, hablen sobre a qué se parece el animal, cómo suena, cómo se siente (tal vez tengas que adivinar), e incluso cómo huele.
Amplía esta actividad llevando contigo un bloc de papel y materiales de dibujo contigo. Luego, invita a tu niño a dibujar un animal por observación directa.