El baño es un momento genial para jugar con jabón y explorar sus propiedades físicas. Antes de que su niña entre en la bañera o la ducha, ofrézcale una barra nueva y seca de jabón e invítela a explorar cómo se ve, huele y siente. ¿Es dura o blanda? ¿Áspera o suave? Juntas, hagan predicciones sobre cómo cambiará el jabón después de estar un tiempo en el agua.
Luego, anímala a sumergir el jabón y ver qué pasa mientras lo frota en su piel, una esponja o incluso un lado de la bañera húmeda. ¿Qué nota? ¿Puede decirte lo que le sucede al jabón y cómo cambia de tamaño, forma y textura? ¿Es más pequeño? ¿Suave? ¿Resbaloso? ¿Y de dónde salen todas esas burbujas?