Las meriendas y las comidas son momentos geniales para explorar cómo se acoplan las formas. Cuando haces un sándwich para tu hijo, trata de cortarlo de una forma distinta – como en cuatro cuadrados – e invita a tu niño a experimentar con las formas mientras come. Sugiérele que separe cuatro cuadrados y luego usa dos de ellos para hacer un rectángulo. ¿Qué pasa cuando cortas el sándwich en triángulos? ¿Cómo puede unirlos para hacer un cuadrado? ¿Qué otros alimentos funcionan bien para aprender sobre formas y cómo pueden juntarse? ¡Experimenta con pizza, manzanas y galletas!